Aunque es una forma de transporte que pocos ven, la navegación tiene un efecto tan poderoso como contaminador. Según un estudio reciente, el transporte marítimo representa más o menos el 3% de las emisiones globales de CO2. Esto no una sorpresa, si consideras que los motores de los aproximadamente 90.000 buques de carga del mundo se encuentran en uso 24 horas al día mientras viajan.
  Aparte de pinos, robles y sauces, en el Parque Natural Ramat HaNadiv de Israel crece una especie nueva: un árbol que se alimenta de energía solar y que constituye una una fuente de energía eléctrica y da wi-fi.
  Durante la presentación de la síntesis de los últimos informes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), que tuvo lugar en Copenhague, Dinamarca, los científicos aseguraron que detener el cambio climático no es imposible y que los costos que significaría no son grandes.