La palabra Buda es un título o un epíteto y no un nombre. Significa "Alguien que está despierto" en el sentido de haberse 'despertado a la realidad'. El título describe el logro de un hombre llamado Siddhartha Gautama, quien vivió hace 2.500 años en el norte de la India.
  Es curioso que la mayoría de las religiones parecieran repetir siempre las mismas bases: la eternidad, la unidad, la trascendencia… todo ello mediante prácticas que purifican a la persona y la liberan de las ataduras que empañan el espíritu.
Hubo un tiempo, ya lejano para todos, en el que se dejó de alzar la vista con asombro y admiración y se empezó a buscar otras cosas. Ocurrió cuando se comenzó a subestimar, descuidar y olvidar el espíritu, dejando que otras cosas ocuparan su lugar. Así es que se empezó a vagar en una búsqueda constante de placer y seguridad, en una huída continua del miedo, el dolor y las incomodidades que no te dejan sentir en paz.