Panamá es el primer país de América Latina y el Caribe que se une a la campaña Mares Limpios de ONU Medio Ambiente. También se ha convertido en el primero de Centroamérica en prohibir la entrega de bolsas plásticas en los comercios, circunstancia que ayudará a reducir el volumen de basura marina en el océano Pacífico y el mar Caribe, el segundo más contaminado por plásticos a nivel mundial.