5 estrategias para aliviar la tensión de tu vida cotidiana

«La acción de tensar el cuello y los hombros en la respuesta de sobresalto es la manera más fundamental en la que se hace un mal uso del cuerpo todos los días, dice Hope Guillerman, una instructora certificada de la Técnica Alexander (un tipo de reeducación de la postura y los movimientos) de la ciudad de Nueva York.».

Hay muchas cosas que puede hacer –o no hacer- todos los días para ayudar a prevenir y aliviar el dolor de cuello y hombros:

 

  • ¿CÓMO MIRAR HACIA ABAJO?: Hazlo correctamente

 

 

“Cuando la mayoría de la gente ve hacia abajo, se doblan desde la mitad de su espalda superior, haciendo que se redondeen sus hombros”, dice Gillerman. Esto coloca mucho peso corporal a tu columna, haciendo que tu cuello y hombros ‘lo agarren’ para que no te caigas hacia delante, dice.

En lugar de hacer eso, mantén el cuello derecho y mira hacia abajo dejando que tu nariz y barbilla caigan hacia delante y se relajen los músculos de tu cuello. Usa afirmaciones anteriores para suavizar tu cuello y ensanchar tus hombros, dice Gillerman. “Esto es verdaderamente crucial para eliminar el dolor de cuello y hombros. Cuando las personas se dan cuenta que eso es lo único que tienen que hacer para mirar hacia abajo, dicen, ‘¡Guau! Eso no hace que se tense mi cuello y mis hombros’”.

 

  • ¿CÓMO HABLAR POR TELÉFONO?: Procura que el auricular vaya hacia ti

 

“Hablar por teléfono es una actividad en la que muchas personas desarrollan mucha tensión en el cuello”, dice Gillerman. El motivo de esto es que inclinan la cabeza hacia el auricular, en lugar de mantenerla equilibrada y derecha y llevar el auricular hasta su oído.

 

 

  • ¿CÓMO CEPILLARTE EL CABELLO?: No dobles tu cuello

 


Cuando te cepilles el cabello, comenta Gillerman, mantén tu cabeza equilibrada y mueve tus brazos y el cepillo hacia tu cabeza.

 

 

  • ¿CÓMO TRABAJAR EN TU ESCRITORIO?: Regálate un descanso

 

Esta es una manera fabulosa de darle un descanso a tu cuello (y cabeza) mientras trabajas, dice Gillerman: Dobla tus brazos de modo que queden uno encima de otro (como hacía la protagonista de Mi bella genio) y colócalos sobre el escritorio. Descansa tu frente sobre la parte superior de tu muñeca; solo deja que se hunda en tus brazos y luego siente cómo se relajan los músculos de tu cuello mientras repites tus afirmaciones.

 

 

  • CUANDO ENCORVAS LOS HOMBROS: Quítalos encogiéndolos

 

Quizás te hayan dicho que tu dolor de hombros es provocado por encorvarlos. Bueno, eso puede empeorar el dolor, dice Gillerman, pero no trates de corregir tu postura echando los hombros hacia atrás. Eso hace que se tensen los músculos trapecios que están en tu espalda, causándote aun más dolor muscular y tensión en el cuello, los hombros y la espalda superior.

¿Dónde debes mantener tus hombros para lograr el máximo nivel de comodidad? Primero, encoje los hombros hacia arriba y deja que caigan hacia delante, luego encójalos y deja que caigan en un punto intermedio. “Ahí es donde debe dejarlos –dice Gillerman-, ahí sentados encima de su cuerpo. Imagine que son hombreras grandes”.

 

 

⇒ Tomado del libro Curas Alternativas de Bill Gottlieb, autor de Nuevas Alternativas para curarse naturalmente

 

Denisse Espinoza