Aunque es una forma de transporte que pocos ven, la navegación tiene un efecto tan poderoso como contaminador. Según un estudio reciente, el transporte marítimo representa más o menos el 3% de las emisiones globales de CO2. Esto no una sorpresa, si consideras que los motores de los aproximadamente 90.000 buques de carga del mundo se encuentran en uso 24 horas al día mientras viajan.